Skinamarink: un despertar experimenal en el terror
Dos niños se despiertan en medio de la noche y descubren que su padre no está y todas las ventanas y puertas de su casa han desaparecido.
Para hacer frente a la extraña situación, los dos llevan almohadas y mantas a la sala de estar y se instalan en una tranquila fiesta de pijamas. Reproducen cintas de video gastadas de dibujos animados para llenar el silencio de la casa y distraer la atención de la situación aterradora e inexplicable. Todo el tiempo con la esperanza de que eventualmente algunos adultos vengan a rescatarlos.
Una película experimental
Si hay algo que caracteriza a este filme es su experimentación en el género del terror, es algo que nunca (por lo menos yo) se había visto antes, esto sin dudas es un gran desafío que no siempre sale bien y este caso no es la excepción al menos, si bien por momentos funciona bien y crean un cierto suspenso o mejor dicho intriga, también por momentos resulta demasiada aburrida por qué deja mucho a la interpretación e imaginación del espectador, por qué en sí en su puesta en escena (lo que vemos en la pantalla) no sucede nada interesante, más allá de algunos momentos específicos, digamos que un ¾ de la peli no sucede literalmente nada… y esto resulta realmente contraproducente para una película de este estilo en donde uno como espectadores constantemente espera que algo salga de la pantalla para asustarte y pegar un grito.
Aspectos técnicos que se destacan.
Ahora bien hay elementos que destacan de esta película más que nada en sus aspectos técnico que funciona muy bien sobre todo para alguien que intenta nutrirse de nuevas maneras de hacer cine o para alguien que simplemente le gusta ver cine totalmente diferente, en este caso el filme le resultan realmente interesante, por muchos elementos tales como el tipo de iluminación, el encuadre (que casi nunca nos deja ver en su totalidad a los personajes), y la utilización de las voces y sonidos en off para crear ese sentimiento de angustia de los niños hacia lo desconocido, hacia la oscuridad, el paso el tiempo y el encierro del lugar.
Un mar de contradicciones…
Para terminar con esta nota, no quiero dejar pasar las diversas opiniones que fui viendo e incluso escuchando en el mismo cine una vez terminada la función, en sí muchas opiniones en contra que menciona que no mostraba nada que le resultó aburrida y muy lenta o que incluso nunca la entendieron y por lo tanto les resultó un bodrio verla pero a la vez había un pequeño grupo de espectadores a los cuales le resultaba realmente interesante y que les generó angustia, pánico, incomodidad e incluso miedo que era algo que no habían visto antes (como ya lo mencione anteriormente). En lo personal a mí me gustó por su manera de experimental en el cine de terror pero en si por momentos me resultaba muy lenta y muy densa.
Estudiante de artes audiovisules en la UNLP sueño en convertirme en cineasta ( para eso estudio) mientras tanto escribo y hablo 📽️🎞️🎬
No me considero cinefilo, pero tengo muchas ganas de aprender.